lunes, 31 de enero de 2011

Acerca de mí

A medida que pasa el tiempo, una luz tenue ilumina mi razón, paralelamente al desbordado y provisoriamente incesante amor que sacude mi alma. Allí, soy capaz de darme cuenta que soy juez de mis acciones, la cárcel en la que cumplo mi condena, un autónomo animal dueño de mis instintos, un antiguo griego que razona, erudito privilegiado de pensar, patético narcisista del intelecto, triste consciencia que adolece del saber, nostálgico caminante de la vida ordinariamente mortal. Ese soy. Nada. Si cada vez que me recuesto, miro las estrellas y contemplo la finitud del hombre en el cosmos mas ninguno me siento, y por tanto, siento una pena dentro que se consuela en el preciso instante en que me doy cuenta que pienso. Allí creo que vuelo, libre como el viento.